domingo, 9 de octubre de 2011

La pesadilla comenzó


Ya han pasado muchos días, Y junto con estos la imposición de las nuevas leyes. No hubo nada que pudiera impedir tal desgracia. Las leyes se aplicaron. Debido a esto se han desatado infinidad de protestas, más que protestas ¡guerras! La crueldad del gobierno es tanta, que ante cualquier revelación del pueblo, se mande al ejercito y asesine a sangre fría. Con toda seguridad puedo decir, que esto es el inicio de días nefastos. La desgracia nos persigue, y todo por el asqueroso gobierno.
Ya no pude asistir a la escuela. Toda la emoción y la ilusión que había sentido de haber entrado a la universidad se quedó atrás.

Las calles eran un caos y un ¡horror! No podía salir de casa por la cantidad de protestas que había, y a la enorme cantidad de muertes qué esto generaba. Es aquí donde me cuestiono:
¿Dónde está el Dios en el qué creía? ¿Dónde esta el Dios qué tanto defendía?  ¿Dónde está aquel ser justo, bueno, amoroso en el qué confiaba?
¡Dónde! ¿Dónde quedó? Sin duda mi fe había desaparecido.
Yo pensaba que esto ya no podía empeorar más. Sin embargo lo hizo, ya que una mañana al estar recostada en mi cuarto, mi madre me gritó con una desesperación enorme. Bajé corriendo preguntándole: ¿Q pasa? Aún recuerdo sus palabras:
"Tu padre tiene que irse Elizabeth; tiene que marcharse".
Se soltó en llanto y no pudo decir nada más.
No sabía realmente por qué mi madre decía eso. Hasta que observe  a Marcos, que estaba sentado en la sala  junto a mi papá. Marcos, es periodista y tenía una sección en el periódico, El Universal, pero fue cancelada. Él había tenido una conversación con mis padres en relación a todo lo que estaba sucediendo. Yo desconcertada pregunté qué pasaba. Marcos, empezó a explicarme:

"El gobierno ha decretado que todos los jefes de familia, sin importar sexo, serán trasladados fuera del país para pagar la deuda que México tiene con Estados Unidos. En caso de oponerse serán asesinados junto con su familia".

Las lágrimas rodaron por mis mejillas. No podía contener el llanto. Mi padre tendría que ir en contra de su voluntad.

(entrada final)

1 comentario:

  1. Hola, esta interesante tu entrada. Lo único que he notado es que haces mucho uso de la coma (,) donde debería ir punto y coma (;). No usas mucho el punto y coma.
    En caso de oponerse, serán asesinados junto con su familia.

    En caso de oponerse; serán asesinados junto con su familia.
    También usas bien algunas subordinaciones.

    Espero te sirva mi observación. Te espero en mi blog para tu critica

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